
Se cuenta que en el siglo pasado, un turista americano fue a la ciudad de El Cairo con la finalidad de visitar a un famoso sabio. El turista se sorprendió al ver que el sabio vivía en un cuartito muy simple y lleno de libros. Las únicas piezas de mobiliario eran una cama, una mesa y un banco.
–¿Dónde están sus muebles?–preguntó el turista. Y el sabio, rápidamente, también preguntó:
–¿Y dónde están los suyos?
–¿Los míos?–se sorprendió el turista–. ¡Pero si yo estoy aquí solamente de paso!
–Yo también...–concluyó el sabio.
La vida en la tierra es solamente temporal. Sin embargo, algunos viven como si fueran a quedarse aquí eternamente y se olvidan de ser felices. El valor de las cosas no está en el tiempo que duran, sino en la intensidad con que suceden. Por eso existen momentos inolvidables, cosas inexplicables y personas incomparables.
La verdadera amistad perdura y se fortalece
ResponderEliminara través del tiempo y la distancia.
No necesitamos ver frecuentemente al amigo
para que la amistad perdure.
Basta saber que éste responderá cuando sea necesario, con un acto de afecto, decomprensión y a veces de sacrificio. Recuerda que la amistad no se conquista, ni se impone;
se cultiva como a una flor ;
se abona con pequeños detalles de cortesía,
de ternura, de respeto, de comprensión y de lealtad.
Se riega con las aguas vivas de desinterés y
de cariño silencioso.
No importa las distancias, los niveles sociales, los años o las culturas, ya que la amistad todo lo borra.
El amigo lejano, el de la niñez o de la juventud produce íntima alegría de haberlo conocido,pero más aún, contar todavía con él.
Nuestra vida se enriquece con su contacto
por breve que este haya sido.
La felicidad del amigo nos da alegría y
sus penas se vuelven nuestras, porque hay un maravilloso lazo invisible que une a los amigos.
Para el que tiene un amigo, no existe la soledad. Bueno bueno ...
“Tú mejor amigo tú mismo” no te fallarás ...
(no se su autor)